El grave incidente diplomático entre Chile e Israel, aparentemente superado por la recepción de las credenciales del embajador Gil Artziely , esconde un conflicto implícito, el de las ideas.
El presidente y los críticos a Israel del gobierno, por llamarlos de una forma elegante, no tienen preguntas sobre el conflicto en el medio oriente, tienen juicios, ideas instaladas, que no se abren al examen de la evidencia o la lógica.
El gobierno funda su actuar en un conjunto de a prioris, de ideas fuerza, de ideología.
Este adoctrinamiento que parecen haber pasado algunos actores centrales de la administración Boric, incluyendo al mismo Boric, dista del empleo del concepto de probabilidades, el opuesto al de los categóricos absolutos.
Aquellos que creemos en las probabilidades valoramos la idea el otro en tanto buscamos que persevere la mejor idea.
Mucho se ha hablado y debatido en la arena política chilena sobre el adoctrinamiento versus la educación, y este incidente es un extraordinario ejemplo para ilustrar la victoria de la doctrina.
Si tratamos de cuantificar el error diplomático de Boric frente a Israel podríamos tomar datos como las horas de cancillería en tratar de enmendar el bochorno, el daño en el prestigio de Chile, el tiempo perdido en los esfuerzos de cooperación en transferencia tecnológica, etc, etc.
Todos estos NO son costos menores. Otro ejemplo, si Chile hubiese profundizado a tiempo sus vínculos con Israel en lo que es Ciber seguridad el ataque a las Fuerzas Armadas pudo haber tenido un resultado diferente.
Por qué esto NO ocurrió a tiempo, podríamos especular y decir que debido al lobby palestino con sus millonarias inversiones en fundar la idea del odio al sionismo.
Podrían ser también , los mismos de siempre, los seguidores de las dictaduras de Venezuela, Nicaragua , Irán y Palestina.
Estos son los costos del adoctrinamiento, cuando los palestinos chilenos invierten en odio a Israel y no en desarrollo para su gente toman una decisión no basada en un racional económico o social, sino en una doctrina más allá de la lógica del bien común. Fuad Chain encarna ,mejor que nadie, esa caricatura cuando plantea que su rol polpitico es ser un ente moral y no combatir la pobreza, qué mas claro?. Alguien lo eligió como un ente moral? o es en realidad su obligación luchar por mejores condiciones de vida para los CHILENOS!! Chain es la voz de la doctrina y no de la razón.
No es la mejor idea la que se impone, es la idea que es adecuada a la doctrina del odio.
Ahora bien, si este adoctrinamiento ya está instalado, si no es materia de teoría , sino que se está usando en la gran política internacional chilena, pues es evidente que puede extenderse a cualquier aspecto de la administración del estado.
¿Cómo salimos de eso? Si uno analiza la experiencia post nazi, o aquellos que han salido del yihadismo se encuentran elementos comunes interesantes.
Primero reconocer que ser nazi, yihadista o antisionista se fundan en la misma idea, el odio y el absolutismo frente a la verdad.
Si nosotros queremos plantearnos frente a este gran muro de mentiras debemos pelear todos los espacios en pos de crear una fisura en la represa. Combatir el adoctrinamiento es la lucha por la verdad, que por cierto no es una única verdad, de otro modo nosotros mismos caeríamos en otro adoctrinamiento de color diverso.
La lucha contra el adoctrinamiento es la lucha por la preeminencia de las mejores ideas, y ahí no hay espacio para vacilaciones.
Daniel Weinstein