El nuevo Chile que está naciendo ha dado la espalda al millón de chilenos que vivimos en el extranjero, no me refiero sólo a que no nos permitieran participar de la Convención Constituyente, sino que simplemente fuimos invisibilizados del debate público.

Si bien es cierto la Constituyente ha mencionado la posibilidad de crear un distrito exterior, por ahora es sólo la declaración de intenciones de una parte pequeña de los constituyentes.

Muchos  políticos me han argumentado que mientras no votemos masivamente, mientras no ejerzamos nuestro derecho constitucional nadie nos verá seriamente, y puede ser que haya algo de verdad en la argumentación.

Por supuesto podría contraargumentar diciendo que es la historia del huevo o la gallina, pues mientras no exista una legislación y un presupuesto que propenda la participación es muy difícil aumentar el universo de votantes, pero eso realmente a nadie le importa mas que a nosotros, y no queda otra que tomar el toro por las astas.

De una revisión rápida de la situación de los chilenos en el extranjero podría decir sin miedo a equivocarme, que en la mayor parte del orbe  la única obligación formal del estado chileno hacia nosotros, darnos servicios consulares, se cumple de forma terriblemente desmejorada, ni hablar de un apoyo a la organización de entidades chilenas en el extranjero.

Es por eso que este año la Comunidad Chilena de Israel se ha planteado dos desafíos paralelos, uno, afianzar su arraigo entre la comunidad local, para ello pretendemos acrecentar nuestro padrón de miembros, nuestra oferta de proyectos y realizar un proceso de elecciones internas.

El segundo es de ´índole internacional, queremos apoyar la creación de entidades representativas en otros países de la zona. Sabemos, por experiencia propia, que el proceso de creación y legalización de una ONG es largo, tedioso y costoso, pero estos años hemos acumulado experticie en ello, y estamos en condiciones de compartir ese conocimiento con otros grupos de chilenos a lo largo del orbe que quieran asumir este desafío.

Solo una red de comunidades chilenas en el extranjero bien organizada y potente podrá ejercer la presión política necesaria para que el mundo político nos de el espacio que nos merecemos.

En estas dos líneas de trabajo estamos integrando nuevos voluntarios e invirtiendo recursos varios, esperamos que este año que se inicia nos traiga nuevos y auspiciadores resultados, y que avancemos de forma solida a crear una organización más potente que tenga una red de organizaciones hermanas por el mundo que logren hacer un aporte a nuestra madre patria Chile y a los diferentes países que nos han acogido por los cuatro puntos cardinales.

Hacemos un llamado a los chilenos en Israel a acercarse a nuestros directores y apoyarnos en este cometidos, y a nuestros compatriotas de otros países que quieran recibir nuestro apoyo contactarse con nosotros.

Chile es más que un territorio es una comunidad inmensa de diversidades que quiere ocupar un nuevo papel en el orden internacional, y donde todos y cada uno de sus ciudadanos deben tener un rol y una responsabilidad en la ejecución de este objetivo.

Terminas el mes de la patria y es momento adecuado para asumir desafíos, es también el inicio de un nuevo año de acuerdo al calendario judío, y que mejor oportunidad para lanzar este llamada a la organización. Chilenos del mundo, unámonos!

 

 

Hernán López

Director Ejecutivo de la Comunidad Chilena de Israel.